Por una cabeza
de un noble potrillo
que justo en la raya
afloja al llegar,
y que al regresar
parece decir:
No olvideis, hermano,
vos sabes, no hay que jugar.
Por una cabeza,
metejon de un dia
de aquella coqueta
y risuena mujer,
que al jurar sonriendo
el amor que esta mintiendo,
quema en una hoguera
todo mi querer.
Por una cabeza,
todas las locuras.
Su boca que besa,
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabeza,
si ella me olvida
que importa perderme
mil veces la vida,
para que vivir.
Cuantos desenganos,
por una cabeza.
Yo jugue mil veces,
no vuelvo a insistir.
Pero si un mirar
me hiere al pasar,
su boca de fuego
otra vez quiero besar.
Basta de carreras,
se acabo la timba.
¡Un final renido
ya no vuelvo a ver!
Pero si algun pingo
llega a ser fija el domingo,
yo me juego entero.
¡Que le voy a hacer..!
Por una cabeza,
todas las locuras.
Su boca que besa,
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabeza,
si ella me olvida
que importa perderme
mil veces la vida,
para que vivir.